Aceptá el diagnóstico. Desafiá el pronóstico
Es importante que cuando te dan el diagnóstico de cáncer puedas aceptarlo.
Es probable que al principio quedes paralizado o que intentes negarlo. A veces puede ser que te enojes. Generalmente el enojo tapa el dolor. Es necesario atravesar el dolor. Animate. Aunque parezca paradójico, esto es bueno.
Una vez que te conectás con el dolor no te instales en él. Lo importante es accionar. Hacer todo lo que te dicen tus médicos y tratar de estar en tu eje. Buscar la paz, la armonía y la diversión es fundamental para el tratamiento.
Es difícil pero no imposible.
Si el médico es negativo, no te da muchas esperanzas o no te contiene lo suficiente hacé otra consulta.
Si el pronóstico es negativo, que no te importe. Desafialo. Si otras personas pudieron curarse vos también podés.
Es importante la actitud de la persona que padece una enfermedad. Tomalo como una circunstancia adversa que tenés que superar.
Desafiar pronósticos es de valientes. Tenés que fortalecerte, concentrate en vos, elegí todo lo que te hace bien. Vas a poder.
Por eso reitero: “Aceptá el diagnóstico, desafiá el pronóstico.
